Propósito del Ayuno
El ayuno es un compromiso espiritual entre tú y Dios.
Es un acto de honor, adoración y consagración, no un plan para perder peso.
El enfoque es buscar más profundamente a Dios y escuchar Su voz.
Tipo de Ayuno
Ayuno de Daniel
Inspirado en Daniel 1:12 – “Te ruego que hagas la prueba con tus siervos por diez días, y nos den legumbres a comer y agua a beber.”
Puedes consumir solo vegetales, frutas y agua.
Evita alimentos procesados, carnes, dulces y pan.
Escrituras de Apoyo
Mateo 6:16-18 – “Cuando ayunen, no pongan cara triste como los hipócritas... su Padre, que ve en lo secreto, los recompensará.”
Isaías 58:6 – “¿No es más bien el ayuno que escogí: desatar las ligaduras de impiedad...?”
Joel 2:12 – “Aun ahora —afirma el Señor—, vuélvanse a mí de todo corazón, con ayuno, llanto y lamento.”
Santiago 4:8 – “Acérquense a Dios, y Él se acercará a ustedes.”
Ayuno Regular
Apunta a ayunar 8 horas al día (con mínima ingesta de agua durante ese tiempo).
Puedes elegir el horario que más te convenga, pero se recomienda la constancia.
En última instancia, los detalles son entre tú y Dios.
Tema del Ayuno
21 Días de Ayuno y Oración
Busca claridad, sanidad, liberación o intimidad con Dios.
Ayuna con oración intencional, lectura bíblica y reflexión.
Práctica Diaria
Escribe en un diario lo que Dios te hable durante el ayuno.
Reflexiona sobre escrituras, revelaciones o avances espirituales.
Mantente enfocado espiritual y mentalmente: cuida tus pensamientos y actitudes.
Enfoque del Ayuno
Arrepentimiento y renovación espiritual – Joel 2:12
Unidad en el cuerpo de Cristo – Juan 17:23
Dirección y visión – Hechos 13:2
Liberación y rompimiento – Marcos 9:29
Intercesión por nuestra nación – 2 Crónicas 7:14
Crecimiento espiritual y hambre de Dios – Mateo 4:4